APORTANDO: HISTORIA,CULTURA Y TRADICIÓN DESDE "LA CUNA DEL SON DE ARTESA". CRUZ GRANDE, GUERRERO, MÉXICO. AÑO VIII
"Aquel Cruz Grande" (D.R.) 2015.
IDEA,DISEÑO,IMÁGENES, TEXTOS Y REALIZACIÓN:
ELISEO JUÁREZ RODRÍGUEZ.
*Queda prohibida cualquier reproducción total o parcial, del material escrito o gráfico, sin el consentimiento de su editor.
*Derechos Registrados (2015). protegidos a favor del autor.
*Derechos Registrados (2015). protegidos a favor del autor.
sábado, 29 de octubre de 2016
"CRONISTA DE LA CIUDAD", DE SAN MARCOS.
Agradable visita de Don Rodríguez Ramírez "Cronista oficial de San Marcos".
Con la finalidad de intercambiar puntos de vista "entre colegas", nos visitó Don Rafael Rodríguez Ramírez quién está realizando un proyecto importante en el vecino poblado. Don Rafael, se dijo sorprendido al enterarse de que "La Cuna del Son de Artesa" no tiene un cronista oficial, figura que todos los municipios contemplan en su nómina. Nosotros agregamos que sería lamentable que Florencio Villarreal este pagando -si fuera el caso- a "un supuesto cronista" sin que haga su trabajo, pero usted sabe amigo lector cómo se manejan las cosas en nuestro México.
Con respecto del trabajo que lleva a cabo el cronista de San Marcos, nos anticipó un libro auspiciado por CONACULTA y un festival que reunirá a más de 10 grupos musicales pagados por el estado -no va a signifaicar costo al municipio-. Pronto tendremos la oportunidad de platicar más e intercambiar información de nuestros municipios.
domingo, 16 de octubre de 2016
FUSILAMIENTO DE UN PRESIDENTE MUNICIPAL: LEOBARDO ACEVEDO MORENO.
Leobardo Acevedo Moreno.
(1893-1933).
El 14 de septiembre de 1922, siendo presidente de la República Álavaro Obregón, fue asesinado Leobardo Acevedo Moreno, presidente municipal de Florencio Villarreal, en tiempos de Rodolfo Nery Lacunza. Chilpancingo, Guerrero; 14 de agosto de 1880.1972 , gobernador del estado de Guerrero.
I.
"CUMPLIENDO ÓRDENES"
Florentina M. Rodríguez, se encaró con el capitán.
-¡Dígame qué delito cometió Leobardo! ¿Porque llega usted a detenerlo? ¿Porqué se lo va a llevar?
-No, si no me lo voy a llevar, -dijo el castrense encendiendo un cigarro-, sólo que vamos a platicar aquí y ya veremos como se va a arreglar esta situación. Créame que no es cosa mía, yo sólo vengo cumpliendo un mandato y si le sirve de consuelo le diré que no es el único presidente municipal que traigo en la lista. Voy a recorrer toda la costa chica para cumplir con mi comisión.
De nada valieron las súplicas de la mujer de Leobardo Acevedo, lo único que logró fue verlo en el despacho de la presidencia donde estaba encerrado en calidad de detenido. Florentina le colocó un escapulario de la Virgen del Cármen. "Ella te va a proteger, pídele con fe Leobardo, ya verás como vamos a salir de esto". Voy a ver a tu hermano "Yoyo" para que sepa lo que está pasando.- le dijo a manera de despedida.
II.
"YOYO"
-¡Vamos Déodro, aún podemos quitarselo, sólo son 6 hombres al mando del capitán, que viene a matarlo!-le dijeron varios hombres del pueblo armados con escopetas y pistolas a "Yoyo".
-No pasa nada, no pasa nada -dijo Déodro-, mi hermano va a platicar con ellos, van ahí a un "mandadito", pero no tardan en regresar, sólo van a ponerse de acuerdo...
-¡Lo van matar Deodro, hay que hacer algo!-le dijo Florentina.
-¡No seas escandalosa! Sólo van a platicar, Leobardo va a regresar sano y salvo...
Los ojos de "Yoyo" brillaban con tal intensidad, que Florentina pudo ver a través de sus pupilas, un inmenso mar de verdura que reflejaban las huertas y bienes que eran propiedad de Leobardo.
III.
EL FUSILAMIENTO.
-Yo sólo soy un servidor del pueblo, si usted quiere renuncio al cargo de presidente municipal. No veo porque me tenga que llevar a fusilar, aquí no hay intenciones de derrocar al gobernador, nosotros estamos a las ordenes para trabajar con él.
-Eso dicen todos pero no se puede correr riesgos riesgos, las instrucciones son claras: todos los presidentes municipales tienen que ser pasados por las armas. -Decía el capitán Torrentera-, comisionado para apagar toda amenaza de levantamiento en contra del gobernador.
Antes de llegar a "Las Marías", Leobardo Acevedo vio a lo lejos por última vez, la cruz de madera que desde "La Loma" era testigo de aquella escena. Pensó en todos sus hijos, pensó en Florentina y en sus pequeños. Ya no le quedaba nada que decir; sabía que aquel hombre tenía instrucciones precisas y no valía ningún argumento que le sirviera para evitar la muerte.
A las tres de la tarde, se escuchó la descarga y el cuerpo de Leobardo cayó abatido bajo las balas de la anarquía del gobierno estatal. El pueblo escuchó aquella detonación con que habían ultimado a Leobardo Acevedo Moreno, cuyo error fue estar en la silla presidencial en los tiempos del gobernador Rodolfo Nery Lacunza.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)