"Aquel Cruz Grande" (D.R.) 2015.

IDEA,DISEÑO,IMÁGENES, TEXTOS Y REALIZACIÓN:
ELISEO JUÁREZ RODRÍGUEZ.
*Queda prohibida cualquier reproducción total o parcial, del material escrito o gráfico, sin el consentimiento de su editor.
*Derechos Registrados (2015). protegidos a favor del autor.

viernes, 24 de marzo de 2017

"LA HISTORIA DE LA FERIA DE MAYO"

Sin duda las ferias son una de las tradiciones más hermosas de nuestro México; ellas generalmente son el festejo y agradecimiento a "los santos patrones" de cada lugar. En Aquel Cruz Grande no podía ser la excepción y como nos han narrado personas que vivieron los albores de nuestra historia contemporánea, la hermosa feria de mayo de Cruz Grande, no se festejaba en las fechas en que se desarrolla actualmente.
Investigaciones de nuestro blog, nos detallan que "la fiesta" se inició allá por los años de 1912 en la época que el ex- presidente David Acevedo+ la celebraba los días 20 de mayo. A iniciativa de el ex-presidente Don Germán Manzo+ la feria de Mayo cambia la fecha de celebración al día 3, día de la santa cruz patrona del pueblo.

Abel Manzanarez García...conquistó el amor enamorándolo con sus valientes montas.
Nuestras fuentes de investigación nos describen que esa feria se realizaba completamente en lo que hoy es el centro histórico de nuestra población, es decir en lo que hoy vemos como zócalo o jardín. Ahí en ese lugar se llevaba a cabo el jaripeo con un redil hecho por los entusiastas hombres de aquellos años. Asi en 1947 el famoso "Chico Bernal" siendo presidente municipal organiza los festejos de la feria, convocando previamente con un bombo a todos los habitantes desde el ayuntamiento. Es así como delega mediante comisiones a las personas que se encargarían de realizar las actividades con que se llevaría a cabo la feria de Mayo. Es a partir de este cambio de fecha de la feria cuando se pide a Francisco Acevedo, (Padre Chico) -presbérito de la parroquia de Cuautepec-, para que venga a oficiar la misa y realice los bautizos y confirmaciones del 3 de mayo. La primera visita del señor obispo data del 3 de mayo de 1960, fecha en que monseñor José de Jesús Quezada Valdéz, es recibido con júbilo y transportado sentado sobre una especie de litera, cargado por hombres piadosos designados por Doña Florentina M. Rodríguez desde la entrada o crucero de Aquel Cruz Grande, hasta las puertas del templo parroquial, con vívas y vítores estentóreos.*

En la incipiente feria de mayo, uno de los atractivos eran Los volantines -que fueron los primeros juegos mecánicos que llegaron a la feria-, eran transportados a lomos de bestias desde el puerto de Acapulco. Es con la llegada de la década sesentera cuando la feria de mayo había logrado ser ya una tradición esperada y su organización contemplaba ya la participación de don Bartolo Rosales y sus juegos mecánicos venidos desde de la capital del estado. Las atracciones se instalaban completamente en el centro del pueblo donde se encontraba una rudimentaria cancha de basquetbol sin piso firme de tableros y soportes rústicos de madera. A su llegada las Atracciones Rosales, despertaban el entusiasmo y la alegría de jóvenes y niños -sobretodo-, que asombrados presenciaban la destreza del personal de don Bartolo en el armado de la monumental rueda de la fortuna. 


El armado de la rueda de la fortuna, era un espéctaculo gratis que los niños disfrutabamos. En cada individuo que participaba en esos trabajos, los niños de Aquel Cruz Grande veíamos a un superhéroe.
Aquel Cruz Grande todavía no contaba con la llegada de la luz eléctrica, los juegos mecánicos de don Bartolo y sus plantas de energía llenaban de luz aquellas noches de feria; instalados enfrente del galerón del ayuntamiento. Desde ahí hasta lo que hoy se conoce como La ganadera, se colocaban los puestos de ropa, enseres, implementos agrícolas -que eran esperados todo el año- y los famosos zandungueros, se alumbraban con bombillas y candiles alimentados por petróleo. No lejos de ahí, en el cruce de la calle principal con la calle Cuauhtémoc, las improvisadas enramadas engalanadas con adornos de papel y bandas multicolores, cantinas equipadas con sinfonolas y hieleras que ofrecían a los parroquianos cerveza fría y la presencia de cortesanas de prostíbulo.

Don Bartolo Rosales. Impulsor de la feria de Mayo, abrazando a quién lo iba a sustituir en la empresa familiar: su hijo Marcelino, quien acrecentó de gran manera las Atracciones , a las que orgullosamente declara cruceña en su razón social.
Las toreadas como eran llamadas por Aquel Cruz Grande las funciones de jaripeo o monta de toros o vaquillas, eran protagonizadas por jinetes espontáneos y los astados eran proporcionados generalmente por los más ricos ganaderos de la comuna; Felícitos y Felipe M. Gatica,+ Familia Manzanarez, Ricardo Felipe, etc,  en casos especiales los toros a montar eran proporcionados por los tablajeros del mercado. El escenario de aquellas montas ya no era obviamente el mismo; ahora se desarrollaban en un nuevo lugar, más espacioso, ya que evidentemente la población había aumentado notablemente, ese lugar -un barrio al oriente de la población-, se ubicaba por el rumbo al panteón, antes de llegar al arroyo de los novios. Al paso de los años, la gente le dio en llamar a este barrio el nombre de "el toril".

Estas actividades lúdicas que se desarrollaban únicamente en el marco de la feria, tenían un horario netamente vespertino, iniciando a las 3 de la tarde y terminando antes de las seis, para que de esa manera la gente se congregara nuevamente a seguir festejando en el centro de Aquel Cruz Grande; con lo que evidentemente era la atracción máxima de la feria: los juegos mecánicos y de azhar. Otra de las actividades que se desarrollaban en la feria eran las peleas de gallos que se efectuaban en el patio de la escuela primaria Josefa O. De Domínguez -no se trata de la que conocemos hoy en la calle Obregón, sino de la primera escuela primaria que compartía el galerón con el ayuntamiento-. Es a mediados de esta década cuando se incorpora como espectáculo el grupo de mariachis y las famosas Coronelas (cantantes femeninas que era cortejada por los galanes de aquellas épocas) a los llamados palenques.

Continuará...


*Como un dato adicional con respecto de la visita de los obispos, podemos afirmar que una vez al año, el obispo de Chilapa visitaba la Costa Chica, realizando confirmaciones y bautizos, entre las poblaciones que tocaba , se encontraba Cruz Grande. Fue hasta la llegada de Victor Fuentes Landa y la instalación oficial de la parroquia de la Santa Cruz que se hace tradicional la visita del Obispo de Acapulco.

1 comentario:

  1. Wow impresionante la historia de nuestro bello cruz grande y de la feria de mayo...

    ResponderEliminar